EL PARADIGMA MUÑOA
La infamia avanza a pasos agigantados. Advertíamos hace semanas que Zapatero ya había pactado con ETA que ésta se podría presentar a las elecciones en Navarra y Euskadi. Que ETA vuelva a las instituciones es un must para el proyecto terrorista, pero también para el zapateril.
Si el virus etarra no infecta el organismo democrático español, su fin está asegurado. ETA necesita el inmenso poder que da estar dentro del sistema democrático para dinamitarlo desde su interior, como hizo durante tantos años de ñoñería por parte de nuestros políticos, de 1978 al 2002. ETA necesita que los ciudadanos financiemos su terrorismo, que le abramos las puertas de ayuntamientos y organismos forales para darle el poder político y social.
Por eso ETA ha amenazado a Zapatero con un atentado terrorífico antes del 27 de Mayo si no le permite que su aparato político participe en las elecciones. Los asesinatos de ETA destruirían las posibilidades de Zapatero en estas municipales y autonómicas, y su batacazo sería preludio del gran fracaso posterior en las generales. Porque aunque la mayoría de sus votantes son como los hinchas de un equipo de fútbol, que votan en función de los colores sin preocuparse de si su política es buena, mala o directamente nos lleva al desastre, hay una franja de votantes en el centro sociológico que le abandonarían desengañados del opio pacifista.
Pero la gravedad del sí de Zapatero a ETA es extrema, porque va a permitir que de nuevo las instituciones se conviertan en focos infectos de la mafia etarra desde donde financiar el terrorismo, amedrentar, extorsionar, boicotear y señalar objetivos de secuestros y asesinatos. Y que nadie diga que eso es una exageración, porque todos sabemos que los etarras disfrazados de concejales, junteros y diputados se han dedicado a coadyuvar las acciones terroristas, amén de financiarlas. Así se ha demostrado varias veces en los tribunales.
Otra vez tendremos el paradigma Ibón Muñoa, ese concejal de Ermua que marcó como objetivo terrorista a su compañero de corporación municipal Miguel Ángel Blanco, cooperó en la preparación del atentado con información, e incluso facilitó el coche para que la bestia de Txapote y su compañera secuestraran, torturaran y asesinaran al inocente.
¿Cuántos cooperantes y cómplices de futuros asesinatos lo serán gracias a que Zapatero les ha permitido ser concejales y junteros? ¿Cuánta sangre derramada será posible gracias a Zapatero? ¿Es que nadie en este país va a denunciar al presidente del gobierno por alta traición, o por sedición?
2 comentarios
Cryp°¿°Tols -
Si a alguien le ineresa participar, puede encontrar una carta tipo en:
http://plazamoyua.org/2007/05/20/cruzarse-de-brazos/
laGuillotina -