Blogia
LA VASCONIA DE LAS LUCES

El rehén de la Moncloa

El rehén de la Moncloa Zapatero, el hombre invisible, el presidente del gobierno español que continua imperturbable de vacaciones mientras en España ha comenzado hace ya una semana un proceso de balcanización que conduce al enfrentamiento entre los españoles de consecuencias sin duda trágicas, está descubriendo su auténtica faz.

El que primero parecía un político de buen talante, respetuoso y dialogante se ha mostrado en ocho meses de gobierno como un personaje hipócrita, populista y demagogo, genuflexo ante caudillos populistas como Fidel Castro, Hugo Chávez o Carod-Rovira, pero despiadado con partidos democráticos como el PP, al que el portavoz zapateril ha llamado matones y canallas.

Pero lo peor es que ahora hemos descubierto que Zapatero, ante una situación de emergencia nacional -similar a la que padeció España en los años treinta- por la declaración de independencia de Ibarretxe, se muestra débil y apaciguador, no porque lo sea, que también, sino porque su mayoría parlamentaria depende de otro partido etnicista y secesionista como el PNV, la ERC del padrino Carod-Rovira. El portavoz de ERC en el Congreso lo ha dicho clarito: o Zapatero se rinde ante Ibarretxe, o le retiran el apoyo parlamentario y se acaba la legislatura. En definitiva, Zapatero ha demostrado ser un gobernante irresponsable y frívolo que es capaz de acabar con la democracia en aras de su ambición de poder y sectarismo.

La aparente tranquilidad del gobierno de Zapatero no esconde más que la imposibilidad, por ser rehén de partidos totalitarios como ERC e IU, de aplicar las leyes del Estado de derecho contra el acto de sedición protagonizado por Ibarretxe. Y no olvidemos que el socio parlamentario de Zapatero, ERC, ha dicho que los españoles nos deberíamos ir preparando porque el sedicioso e ilegal Plan Ibarretxe tan sólo es un aperitivo comparado con lo que vendrá de Cataluña.

Zapatero, el rehén de la Moncloa, no va a evitar el descuartizamiento de la democracia española, y por eso se niega a pactar con el otro gran partido español, el PP, una actuación conjunta para defenderla. Sólo la movilización pacífica y democrática de los ciudadanos españoles lo podría evitar, obligándole a convocar elecciones generales anticipadas. ¿Seremos capaces de hacerlo?

0 comentarios