Blogia
LA VASCONIA DE LAS LUCES

La diáspora democrática vasca

La diáspora democrática vasca Ante Palevic, el nacionalista croata aliado de Hitler, mantenía una tesis que se ha demostrado muy eficaz a la hora de programar políticas de limpieza étnica. Su receta para construir una nación étnica mediante la demolición de los individuos que se oponían a ello era: “un tercio de muertos, un tercio de exilados y un tercio de acobardados”.

Todos los nacionalismos étnicos de una u otra forma han aplicado semejante vademécum. La tenaza nacionalista vasca, con su casta “eclesial” de dominadores de las mentes (PNV-EA) y su casta “guerrera” de dominadores de los cuerpos (ETA-Batasuna), lleva aplicando esta fórmula durante muchos años. Por eso han llegado a la conclusión de que, una vez asesinados cerca de mil vascos, exilados más de 200.000, y acobardados el resto (o casi) de los oponentes al delirio etnicista, es hora de convocar a las urnas para bendecir la secesión. Los que se opondrían a ese proceso de limpieza étnica están muertos, exilados, o acobardados en sus casas.

Para combatir esta ignominia y abrir los ojos a muchas personas de buena fe que hablan del problema vasco sin saber de qué hablan, se constituyeron ayer en Madrid unas Comisiones de la Diáspora Democrática Vasca. Se trata de reivindicar que el terrorismo nacionalista vasco y el gobierno nacionalista vasco excluyente han propiciado el abandono de su hogar de miles de vascos, por miedo o por asco. Así de sencillo.

Allí estaban Fernando Savater, Mikel Buesa, Mikel Azurmedi, José María Calleja y tantos otros vascos ilustres de la diáspora. Pero también muchos otros vascos anónimos, como nos relata El Mundo hoy mismo. Las últimas cifras indican que 119.000 vascos se han marchado de su tierra durante el gobierno de Ibarretxe, y un total de 383.700 en 25 años de gobierno nacionalista. Sobran las palabras.

0 comentarios