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LA VASCONIA DE LAS LUCES

islamismo

NUNCA DESPEJAREMOS LA X

NUNCA DESPEJAREMOS LA X

Abandonemos toda esperanza; en los crímenes producto de la más alta maquinación nunca se llega a despejar la incógnita, nunca se llega a conocer quién es la X, la desconocida cúspide de la pirámide jerárquica que urdió el plan.

¿Acaso sabemos quién fue la X del asesinato de los hermanos Kennedy? ¿O es que pensamos que unos pobres y solitarios desgarramantas cambiaron el curso de la primera potencia mundial?

¿Acaso sabemos quién fue la X del golpe de Estado del 23-F? ¿O es que pensamos que una cuadrilla de guardias civiles enloquecidos y un general monárquico como Milans del Bosch urdieron el golpe que pretendía ’reconducir’ la recién estrenada democracia española?

¿Acaso sabemos quién fue la X del terrorismo de Estado acogido bajo las siglas del GAL? ¿O es que pensamos que dos personajillos como Barrionuevo y Vera fueron capaces de dirigir el descomunal entramado criminal?

¿Por qué vamos a conocer, pues, quién fue la X del atentado terrorista del 11-M en Madrid? ¿O es que pensamos que los moritos de Lavapiés organizaron el mayor atentado terrorista de Europa a tres días de las elecciones que podían cambiar el rumbo del Estado español?

Las grandes jugadas que prestan servicios a personajes o instituciones muy poderosos han de ser por su propia naturaleza secretos.

¿QUIÉN HA SIDO?

¿QUIÉN HA SIDO?

¿Recuerdan el aparato de propaganda goebbelsiano que se desató el 11 de Marzo de 2004 tas la criminal masacre de Madrid? El complejo mediático-empresarial de Polanco y su aparato político, el PSOE de Zapatero, se puso en marcha para derribar el gobierno del PP al que le quedaban tres días antes de las elecciones generales, para “noquear” a un gobierno al que le había “castigado el hígado” ya en la calle con los temas del Prestige y de la guerra de Irak.

Las masas alentadas de forma discreta e indirecta por el trust oligárquico se lanzaron a la calle a llamar asesino a Aznar y al PP, en lugar de increpar a los terroristas -fuesen quienes fuesen-, a preguntar con ira ¿quién ha sido?, a asaltar las sedes del PP, en definitiva, a crear un estado emocional alterado que pudiera dar un vuelco a las encuestas y proporcionar un triunfo inesperado en la elecciones del 14-M. El colofón fue puesto por el comisario político de PRISA en el PSOE, “rasputín” Rubalcaba, que salió en televisión la jornada de reflexión diciendo en el colmo del cinismo que los españoles se merecían un gobierno que no mintiera.

El PSOE ganó en las urnas en esas circunstancias, pero el resultado es inamovible, legal y legítimo. Pero transcurridos dos años, y viendo por un lado que todavía hay muchas incógnitas sobre la autoría intelectual de la matanza, y por otro que Zapatero no se ha limitado a gobernar, sino que ha dinamitado la constitución del 78 para propiciar una suerte de confederación de naciones ibéricas que permita firmar la falsa paz, la paz de la infamia, la paz de Azkoitia, con ETA, tenemos derecho a preguntarnos todavía: ¿QUIÉN HA SIDO?

Porque los islamistas de Lavapiés pusieron las bombas, pero los instructores, los estrategas y la cabeza maquiavélica que lo urdió todo nos son completamente desconocidos. Hay indicios circunstanciales que relacionan a algunos de estos islamistas, delincuentes callejeros de poca monta incapaces de perpetrar una matanza tan bien realizada, con algunos etarras y con algunos militantes socialistas, pero hoy por hoy no hay pruebas fehacientes que muestren una relación con el crimen, a pesar de lo que digan algunos medios de comunicación.

También hay sospechas que no pruebas sobre la intervención de los servicios secretos de otros países, como Marruecos, Francia o Alemania, los baluartes contra la guerra de Irak defendida por Aznar de forma que ha resultado fatal para el PP y sobre todo para España, que es lo importante.

Pero lo que sí está fuera de toda duda es que la “mano de obra” asalariada de magrebíes que puso las bombas tenía relación con las “cloacas” de la Guardia Civil, la Policía nacional y el CNI, es decir, con los restos del naufragio del GAL, aquella infame organización de terrorismo de Estado montada por el PSOE de González. Un GAL que nunca fue desarticulado totalmente, y del cual algunos de sus más destacados miembros siguió promocionando dentro de los aparatos de seguridad del Estado durante los gobiernos de Aznar, en un acto de desidia democrática por parte de éste que ha resultado fatal.

La vicepresidenta Fernández de la Vogue, después de lucir sus carísimos modelitos “african-fashion” por las humildes y empobrecidas tierras africanas, ha declarado con total desparpajo que sabemos ya todo sobre la autoría del 11-M. ¡Qué desvergüenza!

Dos años después, además de llorar a nuestros muertos como seres humanos, debemos como ciudadanos preguntarnos con más fuerza si cabe: ¿QUIÉN HA SIDO?

KALE BORROKA EN PARÍS

KALE BORROKA EN PARÍS Lo que está pasando desde hace más de nueve días en los suburbios de París es mucho más grave de lo que algunos pueden pensar. Es muy grave porque frente a lo que muchos desinformados puedan creer no se trata de algo espontáneo o coyuntural, y además porque los que sucede en París lo sufriremos dentro de unos pocos años en España.

Los que vivimos en el País Vasco sabemos que el terrorismo callejero obedece a una estrategia perfectamente planificada por el núcleo duro de una organización terrorista, y que no es nada que surja de la calle, sino de las alcantarillas del terror. La kale borroka, el vandalismo callejero, es una estrategia terrorista complementaria del atentado con bomba o pistola, porque ambos tan sólo tienen un objetivo: provocar el terror entre los ciudadanos para que éstos obliguen a sus políticos a rendirse ante la organización terrorista y aceptar su programa totalitario.

El islamismo, esa reacción contra la Modernidad que representa en el siglo XXI lo mismo que el nazismo de la centuria pasada, ha declarado la yihad, la guerra santa a Occidente, al Occidente laico o al menos no confesional, porque pretende la sumisión del hombre a su Dios, y de paso la de la mujer al varón, porque no admite ni la libertad, ni la igualdad ni la solidaridad.

El islamismo comenzó el asedio a la Modernidad con atentados monstruosos por medio de aviones y bombas, pero ha llegado la segunda fase de su estrategia: dado que millones de musulmanes, muchos de ellos integristas, han penetrado en Europa, se trata de provocar también el terror desde dentro de la sociedad europea por medio de la kale borroka. Igualito que ETA y que Hamas.

Cuatro millones de musulmanes en Francia, de los cuales se calcula que un 30 % defienden el integrismo islamista y su yihad. Eso supone que más de un millón de ciudadanos franceses apoyan o justifican el terrorismo. ¿No va a haber diez mil islamistas en los suburbios de París que estén dispuestos a incendiar coches y autobuses con mujeres paralíticas dentro, como hacen los cachorros de ETA en nuestra tierra?

Hace tiempo que afirmo que la civilización occidental no tiene futuro en Europa, porque los nuevos bárbaros, los bárbaros de Oriente, nos asedian. Pero como sucedió en la caída del Imperio Romano, los bárbaros entrarán porque les abriremos los portones desde dentro. Porque tenemos a los bárbaros ya dentro, y porque una buena parte de nuestros políticos están ciegos, son negligentes o son sencillamente criminales; porque buena parte de nuestra izquierda, la izquierda náufraga del Muro de Berlín, ha encontrado otro ariete para combatir la libertad en nombre de su programa sectario.

Nuestro ZP es el paradigma del tonto que, creyendo ser listo por utilizar la permisividad con el islamismo para disfrutar del poder haciendo populismo y demagogia, será en realidad utilizado por el integrismo musulmán para su programa de destrucción de la civilización occidental. ZP, el tonto útil que se cree listo.

LO QUE UNE A CEBRIÁN Y TARIQ RAMADAN

LO QUE UNE A CEBRIÁN Y TARIQ RAMADAN La degeneración intelectual y moral del ideólogo de la oligarquía financiero-mediática de PRISA, Juan Luis Cebrián, se ha puesto esta semana de manifiesto con la celebración de un infame y putrefacto simposio sobre la alianza de civilizaciones (sic).

Organizado por el ex-falangista y consejero-delegado de PRISA, por medio de su esposa y bajo la financiación de la Fundación Atman, el colmo del despropósito ha sido que no sólo se ha invitado a dar conferencias y a mantener debates a gente de poca altura intelectual pero de gran utilidad (lo que los marxistas llamaban “tontos útiles”) para convertirse en caballos de Troya del integrismo islámico dentro de la civilización occidental, como los ínclitos y paniaguados de PRISA Juan Goytisolo o Gema Martín Muñoz. Lo realmente ignominioso ha sido que se ha invitado a un ideólogo del terrorismo islamista tan importante como criminal, Tariq Ramadan.

Sobre este miserable ya se ha dicho todo. Tienen prohibida su entrada en muchos países occidentales, no sólo en el odiado por “la izquierda caviar” de nuestros yuppies posmodernos, Estados Unidos, sino incluso en su referencia antiamericana, Francia. Una breve pero aguda pincelada sobre este autor intelectual de horribles masacres es la que ofreció hace tiempo Lucrecio.

¿Qué une a Juan Luis Cebrián y Tariq Ramadan? Sólo una cosa, su odio a la civilización occidental, uno de cuyos elementos constituyentes es el espíritu liberal y emprendedor de muchos europeos de origen judío. Cebrián y Ramadan son judeófobos, porque han mamado esa ideología desde la cuna. El primero, en el falangismo, siempre germanófilo y por tanto mimetizador del antisemitismo nazi, y el segundo en el islamismo militante contra la única cuña de civilización que existe en Oriente Medio, Israel.

La izquierda posmoderna y el islamismo radical, esa sí que es una auténticam alianza contra la civilización.

ALIANZA DE LA CIVILIZACIÓN CON LA BARBARIE

ALIANZA DE LA CIVILIZACIÓN CON LA BARBARIE Zapatero sigue como “Don Erre que erre” con su cantinela narcotizante de la alianza de civilizaciones (sic). Su fracaso en la ONU ha sido estrepitoso, del mismo tenor que el ridículo que ha protagonizado el Rey Juan Carlos, porque éste ha roto su papel constitucional de mediador no partidista al situarse como defensor de una política zapateril sectaria.

El monarca, al abrigo del poder fáctico de la oligarquía financiero-mediática de Polanco, se siente seguro para dedicarse a su deporte favorito, la “caza” (en sentido literal y en sentido figurado). Pero algún día el pueblo español despertará de su sueño inducido por Don Jesús y su “monchito” monclovita, y podríamos ver al regio nieto seguir los mismos pasos de su abuelo de la abdicación al exilio por no defender la libertad de todos los españoles expresada en la constitución de 1978.

La alianza de civilizaciones (sic) es un viejo invento de dos reaccionarios y oscurantistas clérigos ya periclitados (el islamista Jatamí y el católico Juan Pablo II), y pretende el entendimiento entre la civilización (Occidente) y la barbarie teocrática (el Islam) o sencillamente totalitaria (dictaduras tercermundistas, dictadura china). No puede haber alianza entre los pocos países democráticos y las dictaduras, que suponen dos tercios de los países representados en la ONU.

Pero es la misma teoría que la negociación con ETA. Diálogo entre un Estado de derecho y una organización terrorista cuyo objetivo irrenunciable se plasma en tres actos inconstitucionales: amnistía para los terroristas, anexión de Navarra por el País Vasco y autodeterminación de la gran Euskal Herria.

Patético Zapatero y patéticos ciudadanos españoles que todavía le siguen embelesados como los niños al flautista de Hamelin.

¿CIVILIZACIÓN? ISLÁMICA

¿CIVILIZACIÓN? ISLÁMICA Alianza de civilizaciones. Bien. Estamos de acuerdo en que hay que tratar de evitar el choque de civilizaciones.

¿Qué significa la alianza del mundo occidental con el mundo islamista?
¿Cómo se armoniza el Estado de derecho con la Sharia?
¿Cómo se armoniza la Justicia con la Yihad?
¿Cómo se armoniza la libertad individual con la sumisión a Dios?
¿Cómo se armoniza la Democracia con la Teocracia?
¿Cómo se armonizan los derechos cívicos y políticos con la opresión y la represión?
¿Cómo se armonizan los derechos humanos de las mujeres con su sumisión al varón?
¿Cómo se armoniza la protección de la Ley con el rito de violación y lapidación de mujeres?

¿Alianza de la civilización occidental con la barbarie islamista?

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¿Civilización islámica? Creo que sería una excelente idea.

(Paráfrasis inversa de la eurofóbica y demagógica máxima del “mahatma” Gandhi).

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Y puestos a parafrasear sentencias peligrosamente equivocadas, pero dándoles la vuelta como a un calcetín, reinventemos un graffiti de la Nanterre noventayochista:

La alianza de civilizaciones es la vaselina de los culeadores de la democracia occidental

Pongámoslo en el frontispicio de nuestros templos democráticos.

LECTURAS DE VERANO PARA ZAPATERO

LECTURAS DE VERANO PARA ZAPATERO Vamos a ver si ZP aprovecha sus maravillosas vacaciones en Canarias en un palacio recomendado por el mismísimo Borbón para adquirir un poquito de ilustración.

De momento, para que no se atragante porque dado el estado catatónico de su cerebro una dosis excesiva de sabiduría política podría ser mortal, sólo estos dos parrafitos del sabio florentino Giovanni Sartori:

P.- Usted dijo entonces que la decisión de Zapatero fue cobarde.

R.- ¿De qué servía marcharse una vez creado el problema? Bush se equivocó y Zapatero más aún, víctima del ciego pacifismo. Huir del problema no es resolverlo. Consumado el desastre de la Guerra de Irak, era peor abandonar el país porque se abren los riesgos de un nuevo frente islámico radical. Todo esto demuestra que Occidente ha infravalorado o malinterpretado el problema del terrorismo islámico. Debemos admitir además que ya no somos una civilización fuerte. Hemos perdido la capacidad de resistencia a fuerza de regodearnos en el propio bienestar.

P.- Ya sabe que muchos de sus colegas consideran que la raíz del problema es precisamente la desigualdad. Y que la desigualdad es el instrumento de manipulación del terrorismo.

R.- La raíz del problema no es la desigualdad económica ni el hambre. Es el fanatismo religioso, el fundamentalismo, la exacerbación. Inútil buscarles otras explicaciones a los actos bárbaros y a las masacres. No entro en ese juego.

LO QUE VA DE BLAIR A ZAPATERO

LO QUE VA DE BLAIR A ZAPATERO Es la distancia entre un estadista –sin duda el único líder político existente hoy mismo en la Europa de los incompetentes demagogos Chirac, Schröder y compañía- y un charlatán de feria.

Ante la matanza de probablemente cien santos inocentes en Londres en nombre de la yihad (guerra santa) y de la sharia (ley de la Barbarie), esto es lo que dice un líder político:

“Nuestra determinación para defender nuestros valores y nuestra forma de vida es más fuerte que su determinación de causar muerte y destrucción a personas inocentes en el mundo”

Y esto es lo que dice un iletrado vendedor de crecepelo:

"No podemos hacer la vista gorda ante conflictos que se han enquistado o ante las enormes diferencias de tipo económico, político y social en muchas sociedades, que de vez en cuando se utilizan como pretextos falsos de la violencia terrorista. No es realista aspirar a la paz y a la estabilidad en un mar de injusticia universal”.

Lo que va de la Ilustración al oscurantismo, lo que va del combate por la libertad a la rendición de la contemporización, lo que va del amor por la democracia al relativismo cultural, lo que va de la defensa de la Justicia al relativismo moral, lo que va de Gran Bretaña a España, lo que va de Blair a Zapatero …

MASACRE ISLAMISTA EN LONDRES

MASACRE ISLAMISTA EN LONDRES "No nos amedrentarán, no nos aterrorizarán, no cambiarán nuestra forma de vida, no nos ganarán, no nos dividirán, no conseguirán sus objetivos. Nuestra determinación es mayor que su voluntad". Las palabras del primer ministro británico Tony Blair tras conocer el atentado criminal islamista en Londres marcan la diferencia entre una sociedad occidental madura, con más de dos siglos de democracia, y que por lo tanto ha sabido elegir a un líder político a su altura, y otras sociedades como la española que no hace mucho que han accedido a un periodo continuado de democracia.

En situaciones trágicas como éstas es cuando sale a relucir la enorme diferencia entre países como Gran Bretaña y España, con una historia democrática tan dispar. Ya en el siglo XVII hubo una revolución democrática en Inglaterra y también un movimiento filosófico encabezado por Locke que fueron posteriormente los progenitores de la Ilustración europea radicada principalmente en la Francia de las luces. Sólo en Inglaterra podía haber mamado la nutritiva leche de la Modernidad un ilustrado como Voltaire.

Después del atentado nadie de la oposición en Gran Bretaña ha culpado de ineficacia al gobierno. Ningún político ha pedido la retirada de las tropas británicas de Irak. Ningún holding mediático ha llamado a la ciudadanía a asaltar las sedes del partido en el gobierno. Ningún ciudadano ha salido en manifestación para llamar a Blair asesino. Ninguna madre de ningún asesinado en la matanza islamista ha declarado en público que el culpable de la muerte de su hijo no era el islamismo sino su presidente de gobierno por acudir a la guerra de Irak…

Y es que los ciudadanos británicos tienen clara la esencia de la amenaza del siglo XXI, equivalente a la que supuso el nazismo en el siglo pasado, la amenaza del islamismo. El islamismo, que es la facción fundamentalista de la religión musulmana, es muy poderoso y tiene según los expertos al menos al 30 % de los musulmanes del mundo de su lado, es decir, a favor del exterminio de los no musulmanes. Su éxito se basa en que interpretan la sharia, la ley musulmana, de forma dogmática: “La democracia es la aplicación del sistema capitalista basado en la separación de la religión y la vida pública. Esa visión emana de su impiedad, y por tanto, está formalmente prohibida por la sharia. La libertad es totalmente contraria al Islam, porque somos esclavos de Dios y su profeta Mahoma”.

Mientras los ciudadanos occidentales no comprendan que existe un ejército potencial de al menos 400 millones de islamistas dispuesto a destruir la civilización occidental, porque la libertad es contraria a la sharia, y por tanto a llevar a cabo la yihad, la guerra santa, nuestra civilización estará en peligro.

Mientras los ciudadanos occidentales no perciban que existe en nuestra sociedad un quintacolumnismo arraigado esencialmente en cierta izquierda posmoderna y en cierto sector del cristianismo que proclama que contra el fanatismo criminal la receta es talante, diálogo y pacifismo, y que pretende una alianza de civilizaciones (sic) entre la civilización y la barbarie de la sharia, nuestra civilización estará en peligro.

Sólo se puede combatir lo que se conoce. La terrible masacre de Londres nos muestra que los británicos están mucho más avanzados que los españoles en ese camino.

La libertad y el Islam

La libertad y el Islam El mayor demagogo del mundo, el hombre de la máscara sonriente, se dirigió a una selecta asamblea de dirigentes del club más “democrático” del mundo, la Liga Árabe, organización que agrupa a 22 países, ninguno de los cuales mantiene un sistema mínimamente democrático, y dijo:

«El Islam es un pacífico y tolerante elemento de identidad de muchos países y de muchos pueblos».

«No hay incompatibilidad alguna entre la democracia y el mundo árabe».


Y le aplaudieron a rabiar. Siempre han sido muy útiles los tontos.

Literal trascrito de un medio islámico moderado, el programa televisivo “Al charia wal hayat” (Sharia y vida) de Al Jazzira: «La democracia es la aplicación del sistema capitalista basado en la separación de la religión y la vida pública. Esa visión emana de su impiedad, y por tanto, está formalmente prohibida por la sharia. La libertad es totalmente contraria al Islam, porque somos esclavos de Dios y su profeta Mahoma».

El rehén de la Moncloa

El rehén de la Moncloa Zapatero, el hombre invisible, el presidente del gobierno español que continua imperturbable de vacaciones mientras en España ha comenzado hace ya una semana un proceso de balcanización que conduce al enfrentamiento entre los españoles de consecuencias sin duda trágicas, está descubriendo su auténtica faz.

El que primero parecía un político de buen talante, respetuoso y dialogante se ha mostrado en ocho meses de gobierno como un personaje hipócrita, populista y demagogo, genuflexo ante caudillos populistas como Fidel Castro, Hugo Chávez o Carod-Rovira, pero despiadado con partidos democráticos como el PP, al que el portavoz zapateril ha llamado matones y canallas.

Pero lo peor es que ahora hemos descubierto que Zapatero, ante una situación de emergencia nacional -similar a la que padeció España en los años treinta- por la declaración de independencia de Ibarretxe, se muestra débil y apaciguador, no porque lo sea, que también, sino porque su mayoría parlamentaria depende de otro partido etnicista y secesionista como el PNV, la ERC del padrino Carod-Rovira. El portavoz de ERC en el Congreso lo ha dicho clarito: o Zapatero se rinde ante Ibarretxe, o le retiran el apoyo parlamentario y se acaba la legislatura. En definitiva, Zapatero ha demostrado ser un gobernante irresponsable y frívolo que es capaz de acabar con la democracia en aras de su ambición de poder y sectarismo.

La aparente tranquilidad del gobierno de Zapatero no esconde más que la imposibilidad, por ser rehén de partidos totalitarios como ERC e IU, de aplicar las leyes del Estado de derecho contra el acto de sedición protagonizado por Ibarretxe. Y no olvidemos que el socio parlamentario de Zapatero, ERC, ha dicho que los españoles nos deberíamos ir preparando porque el sedicioso e ilegal Plan Ibarretxe tan sólo es un aperitivo comparado con lo que vendrá de Cataluña.

Zapatero, el rehén de la Moncloa, no va a evitar el descuartizamiento de la democracia española, y por eso se niega a pactar con el otro gran partido español, el PP, una actuación conjunta para defenderla. Sólo la movilización pacífica y democrática de los ciudadanos españoles lo podría evitar, obligándole a convocar elecciones generales anticipadas. ¿Seremos capaces de hacerlo?

El rehén de la Moncloa

El rehén de la Moncloa Zapatero, el hombre invisible, el presidente del gobierno español que continua imperturbable de vacaciones mientras en España ha comenzado hace ya una semana un proceso de balcanización que conduce al enfrentamiento entre los españoles de consecuencias sin duda trágicas, está descubriendo su auténtica faz.

El que primero parecía un político de buen talante, respetuoso y dialogante se ha mostrado en ocho meses de gobierno como un personaje hipócrita, populista y demagogo, genuflexo ante caudillos populistas como Fidel Castro, Hugo Chávez o Carod-Rovira, pero despiadado con partidos democráticos como el PP, al que el portavoz zapateril ha llamado matones y canallas.

Pero lo peor es que ahora hemos descubierto que Zapatero, ante una situación de emergencia nacional -similar a la que padeció España en los años treinta- por la declaración de independencia de Ibarretxe, se muestra débil y apaciguador, no porque lo sea, que también, sino porque su mayoría parlamentaria depende de otro partido etnicista y secesionista como el PNV, la ERC del padrino Carod-Rovira. El portavoz de ERC en el Congreso lo ha dicho clarito: o Zapatero se rinde ante Ibarretxe, o le retiran el apoyo parlamentario y se acaba la legislatura. En definitiva, Zapatero ha demostrado ser un gobernante irresponsable y frívolo que es capaz de acabar con la democracia en aras de su ambición de poder y sectarismo.

La aparente tranquilidad del gobierno de Zapatero no esconde más que la imposibilidad, por ser rehén de partidos totalitarios como ERC e IU, de aplicar las leyes del Estado de derecho contra el acto de sedición protagonizado por Ibarretxe. Y no olvidemos que el socio parlamentario de Zapatero, ERC, ha dicho que los españoles nos deberíamos ir preparando porque el sedicioso e ilegal Plan Ibarretxe tan sólo es un aperitivo comparado con lo que vendrá de Cataluña.

Zapatero, el rehén de la Moncloa, no va a evitar el descuartizamiento de la democracia española, y por eso se niega a pactar con el otro gran partido español, el PP, una actuación conjunta para defenderla. Sólo la movilización pacífica y democrática de los ciudadanos españoles lo podría evitar, obligándole a convocar elecciones generales anticipadas. ¿Seremos capaces de hacerlo?

El rehén de la Moncloa

El rehén de la Moncloa Zapatero, el hombre invisible, el presidente del gobierno español que continua imperturbable de vacaciones mientras en España ha comenzado hace ya una semana un proceso de balcanización que conduce al enfrentamiento entre los españoles de consecuencias sin duda trágicas, está descubriendo su auténtica faz.

El que primero parecía un político de buen talante, respetuoso y dialogante se ha mostrado en ocho meses de gobierno como un personaje hipócrita, populista y demagogo, genuflexo ante caudillos populistas como Fidel Castro, Hugo Chávez o Carod-Rovira, pero despiadado con partidos democráticos como el PP, al que el portavoz zapateril ha llamado matones y canallas.

Pero lo peor es que ahora hemos descubierto que Zapatero, ante una situación de emergencia nacional -similar a la que padeció España en los años treinta- por la declaración de independencia de Ibarretxe, se muestra débil y apaciguador, no porque lo sea, que también, sino porque su mayoría parlamentaria depende de otro partido etnicista y secesionista como el PNV, la ERC del padrino Carod-Rovira. El portavoz de ERC en el Congreso lo ha dicho clarito: o Zapatero se rinde ante Ibarretxe, o le retiran el apoyo parlamentario y se acaba la legislatura. En definitiva, Zapatero ha demostrado ser un gobernante irresponsable y frívolo que es capaz de acabar con la democracia en aras de su ambición de poder y sectarismo.

La aparente tranquilidad del gobierno de Zapatero no esconde más que la imposibilidad, por ser rehén de partidos totalitarios como ERC e IU, de aplicar las leyes del Estado de derecho contra el acto de sedición protagonizado por Ibarretxe. Y no olvidemos que el socio parlamentario de Zapatero, ERC, ha dicho que los españoles nos deberíamos ir preparando porque el sedicioso e ilegal Plan Ibarretxe tan sólo es un aperitivo comparado con lo que vendrá de Cataluña.

Zapatero, el rehén de la Moncloa, no va a evitar el descuartizamiento de la democracia española, y por eso se niega a pactar con el otro gran partido español, el PP, una actuación conjunta para defenderla. Sólo la movilización pacífica y democrática de los ciudadanos españoles lo podría evitar, obligándole a convocar elecciones generales anticipadas. ¿Seremos capaces de hacerlo?

El rehén de la Moncloa

El rehén de la Moncloa Zapatero, el hombre invisible, el presidente del gobierno español que continua imperturbable de vacaciones mientras en España ha comenzado hace ya una semana un proceso de balcanización que conduce al enfrentamiento entre los españoles de consecuencias sin duda trágicas, está descubriendo su auténtica faz.

El que primero parecía un político de buen talante, respetuoso y dialogante se ha mostrado en ocho meses de gobierno como un personaje hipócrita, populista y demagogo, genuflexo ante caudillos populistas como Fidel Castro, Hugo Chávez o Carod-Rovira, pero despiadado con partidos democráticos como el PP, al que el portavoz zapateril ha llamado matones y canallas.

Pero lo peor es que ahora hemos descubierto que Zapatero, ante una situación de emergencia nacional -similar a la que padeció España en los años treinta- por la declaración de independencia de Ibarretxe, se muestra débil y apaciguador, no porque lo sea, que también, sino porque su mayoría parlamentaria depende de otro partido etnicista y secesionista como el PNV, la ERC del padrino Carod-Rovira. El portavoz de ERC en el Congreso lo ha dicho clarito: o Zapatero se rinde ante Ibarretxe, o le retiran el apoyo parlamentario y se acaba la legislatura. En definitiva, Zapatero ha demostrado ser un gobernante irresponsable y frívolo que es capaz de acabar con la democracia en aras de su ambición de poder y sectarismo.

La aparente tranquilidad del gobierno de Zapatero no esconde más que la imposibilidad, por ser rehén de partidos totalitarios como ERC e IU, de aplicar las leyes del Estado de derecho contra el acto de sedición protagonizado por Ibarretxe. Y no olvidemos que el socio parlamentario de Zapatero, ERC, ha dicho que los españoles nos deberíamos ir preparando porque el sedicioso e ilegal Plan Ibarretxe tan sólo es un aperitivo comparado con lo que vendrá de Cataluña.

Zapatero, el rehén de la Moncloa, no va a evitar el descuartizamiento de la democracia española, y por eso se niega a pactar con el otro gran partido español, el PP, una actuación conjunta para defenderla. Sólo la movilización pacífica y democrática de los ciudadanos españoles lo podría evitar, obligándole a convocar elecciones generales anticipadas. ¿Seremos capaces de hacerlo?

El rehén de la Moncloa

El rehén de la Moncloa Zapatero, el hombre invisible, el presidente del gobierno español que continua imperturbable de vacaciones mientras en España ha comenzado hace ya una semana un proceso de balcanización que conduce al enfrentamiento entre los españoles de consecuencias sin duda trágicas, está descubriendo su auténtica faz.

El que primero parecía un político de buen talante, respetuoso y dialogante se ha mostrado en ocho meses de gobierno como un personaje hipócrita, populista y demagogo, genuflexo ante caudillos populistas como Fidel Castro, Hugo Chávez o Carod-Rovira, pero despiadado con partidos democráticos como el PP, al que el portavoz zapateril ha llamado matones y canallas.

Pero lo peor es que ahora hemos descubierto que Zapatero, ante una situación de emergencia nacional -similar a la que padeció España en los años treinta- por la declaración de independencia de Ibarretxe, se muestra débil y apaciguador, no porque lo sea, que también, sino porque su mayoría parlamentaria depende de otro partido etnicista y secesionista como el PNV, la ERC del padrino Carod-Rovira. El portavoz de ERC en el Congreso lo ha dicho clarito: o Zapatero se rinde ante Ibarretxe, o le retiran el apoyo parlamentario y se acaba la legislatura. En definitiva, Zapatero ha demostrado ser un gobernante irresponsable y frívolo que es capaz de acabar con la democracia en aras de su ambición de poder y sectarismo.

La aparente tranquilidad del gobierno de Zapatero no esconde más que la imposibilidad, por ser rehén de partidos totalitarios como ERC e IU, de aplicar las leyes del Estado de derecho contra el acto de sedición protagonizado por Ibarretxe. Y no olvidemos que el socio parlamentario de Zapatero, ERC, ha dicho que los españoles nos deberíamos ir preparando porque el sedicioso e ilegal Plan Ibarretxe tan sólo es un aperitivo comparado con lo que vendrá de Cataluña.

Zapatero, el rehén de la Moncloa, no va a evitar el descuartizamiento de la democracia española, y por eso se niega a pactar con el otro gran partido español, el PP, una actuación conjunta para defenderla. Sólo la movilización pacífica y democrática de los ciudadanos españoles lo podría evitar, obligándole a convocar elecciones generales anticipadas. ¿Seremos capaces de hacerlo?

El rehén de la Moncloa

El rehén de la Moncloa Zapatero, el hombre invisible, el presidente del gobierno español que continua imperturbable de vacaciones mientras en España ha comenzado hace ya una semana un proceso de balcanización que conduce al enfrentamiento entre los españoles de consecuencias sin duda trágicas, está descubriendo su auténtica faz.

El que primero parecía un político de buen talante, respetuoso y dialogante se ha mostrado en ocho meses de gobierno como un personaje hipócrita, populista y demagogo, genuflexo ante caudillos populistas como Fidel Castro, Hugo Chávez o Carod-Rovira, pero despiadado con partidos democráticos como el PP, al que el portavoz zapateril ha llamado matones y canallas.

Pero lo peor es que ahora hemos descubierto que Zapatero, ante una situación de emergencia nacional -similar a la que padeció España en los años treinta- por la declaración de independencia de Ibarretxe, se muestra débil y apaciguador, no porque lo sea, que también, sino porque su mayoría parlamentaria depende de otro partido etnicista y secesionista como el PNV, la ERC del padrino Carod-Rovira. El portavoz de ERC en el Congreso lo ha dicho clarito: o Zapatero se rinde ante Ibarretxe, o le retiran el apoyo parlamentario y se acaba la legislatura. En definitiva, Zapatero ha demostrado ser un gobernante irresponsable y frívolo que es capaz de acabar con la democracia en aras de su ambición de poder y sectarismo.

La aparente tranquilidad del gobierno de Zapatero no esconde más que la imposibilidad, por ser rehén de partidos totalitarios como ERC e IU, de aplicar las leyes del Estado de derecho contra el acto de sedición protagonizado por Ibarretxe. Y no olvidemos que el socio parlamentario de Zapatero, ERC, ha dicho que los españoles nos deberíamos ir preparando porque el sedicioso e ilegal Plan Ibarretxe tan sólo es un aperitivo comparado con lo que vendrá de Cataluña.

Zapatero, el rehén de la Moncloa, no va a evitar el descuartizamiento de la democracia española, y por eso se niega a pactar con el otro gran partido español, el PP, una actuación conjunta para defenderla. Sólo la movilización pacífica y democrática de los ciudadanos españoles lo podría evitar, obligándole a convocar elecciones generales anticipadas. ¿Seremos capaces de hacerlo?

El rehén de la Moncloa

El rehén de la Moncloa Zapatero, el hombre invisible, el presidente del gobierno español que continua imperturbable de vacaciones mientras en España ha comenzado hace ya una semana un proceso de balcanización que conduce al enfrentamiento entre los españoles de consecuencias sin duda trágicas, está descubriendo su auténtica faz.

El que primero parecía un político de buen talante, respetuoso y dialogante se ha mostrado en ocho meses de gobierno como un personaje hipócrita, populista y demagogo, genuflexo ante caudillos populistas como Fidel Castro, Hugo Chávez o Carod-Rovira, pero despiadado con partidos democráticos como el PP, al que el portavoz zapateril ha llamado matones y canallas.

Pero lo peor es que ahora hemos descubierto que Zapatero, ante una situación de emergencia nacional -similar a la que padeció España en los años treinta- por la declaración de independencia de Ibarretxe, se muestra débil y apaciguador, no porque lo sea, que también, sino porque su mayoría parlamentaria depende de otro partido etnicista y secesionista como el PNV, la ERC del padrino Carod-Rovira. El portavoz de ERC en el Congreso lo ha dicho clarito: o Zapatero se rinde ante Ibarretxe, o le retiran el apoyo parlamentario y se acaba la legislatura. En definitiva, Zapatero ha demostrado ser un gobernante irresponsable y frívolo que es capaz de acabar con la democracia en aras de su ambición de poder y sectarismo.

La aparente tranquilidad del gobierno de Zapatero no esconde más que la imposibilidad, por ser rehén de partidos totalitarios como ERC e IU, de aplicar las leyes del Estado de derecho contra el acto de sedición protagonizado por Ibarretxe. Y no olvidemos que el socio parlamentario de Zapatero, ERC, ha dicho que los españoles nos deberíamos ir preparando porque el sedicioso e ilegal Plan Ibarretxe tan sólo es un aperitivo comparado con lo que vendrá de Cataluña.

Zapatero, el rehén de la Moncloa, no va a evitar el descuartizamiento de la democracia española, y por eso se niega a pactar con el otro gran partido español, el PP, una actuación conjunta para defenderla. Sólo la movilización pacífica y democrática de los ciudadanos españoles lo podría evitar, obligándole a convocar elecciones generales anticipadas. ¿Seremos capaces de hacerlo?

Aliándose con el enemigo

Aliándose con el enemigo Zapatero sigue dándonos la brasa con su teoría de la alianza de civilizaciones. Como discurso buenista, pacifista y angelical de un líder populista, que busca satisfacer los ingenuos sentimientos de una buena parte de los ciudadanos para mantenerse en el poder, es entendible, aunque absurdo, según explica con claridad meridiana el historiador Henry Kamen en ¿Qué alianza? ¿Qué civilizaciones?.

Pero hoy desvela en una filtración a EL PAÍS que propone un pacto contra el terrorismo internacional (quiere decir islamista) con la colaboración de los países islámicos (sic). Es decir, pretende llevar su falaz alianza de civilizaciones hasta el absurdo. No es suficiente estupidez desear una alianza entre las democracias occidentales y las teocracias islámicas. No es suficiente barbaridad querer compartir valores como ausencia de libertad de expresión, de religión y de acción política, discriminación de la mujer hasta llegar a la lapidación por conducta inmoral (sic), intolerancia sexual, etc.

Pues no parece suficiente. Ahora Zapatero pretende aliarse con el caldo de cultivo del fanatismo islámico que produce el terrorismo islamista para acabar con éste (sic). Es justamente el espíritu contrario del Pacto por las libertades y contra el terrorismo que ha permitido la derrota política de ETA y la casi derrota operativa de esta banda terrorista. Precisamente el preámbulo de este pacto denunciaba el caldo de cultivo y el apoyo indirecto al terror nacionalista de ciertos partidos nacionalistas, que es lo que hizo que estos no firmaran el pacto, pero que era la clave para estrangular la base ideológica, social y financiera de ETA.

Pues ahora Zapatero pretende justo lo contrario: dar soporte al fanatismo islámico que genera recursos humanos y financieros para el terrorismo islamista. Zapatero pretende que nos aliemos con nuestro enemigo. ¡Conmigo que no cuente!

Aliándose con el enemigo

Aliándose con el enemigo Zapatero sigue dándonos la brasa con su teoría de la alianza de civilizaciones. Como discurso buenista, pacifista y angelical de un líder populista, que busca satisfacer los ingenuos sentimientos de una buena parte de los ciudadanos para mantenerse en el poder, es entendible, aunque absurdo, según explica con claridad meridiana el historiador Henry Kamen en ¿Qué alianza? ¿Qué civilizaciones?.

Pero hoy desvela en una filtración a EL PAÍS que propone un pacto contra el terrorismo internacional (quiere decir islamista) con la colaboración de los países islámicos (sic). Es decir, pretende llevar su falaz alianza de civilizaciones hasta el absurdo. No es suficiente estupidez desear una alianza entre las democracias occidentales y las teocracias islámicas. No es suficiente barbaridad querer compartir valores como ausencia de libertad de expresión, de religión y de acción política, discriminación de la mujer hasta llegar a la lapidación por conducta inmoral (sic), intolerancia sexual, etc.

Pues no parece suficiente. Ahora Zapatero pretende aliarse con el caldo de cultivo del fanatismo islámico que produce el terrorismo islamista para acabar con éste (sic). Es justamente el espíritu contrario del Pacto por las libertades y contra el terrorismo que ha permitido la derrota política de ETA y la casi derrota operativa de esta banda terrorista. Precisamente el preámbulo de este pacto denunciaba el caldo de cultivo y el apoyo indirecto al terror nacionalista de ciertos partidos nacionalistas, que es lo que hizo que estos no firmaran el pacto, pero que era la clave para estrangular la base ideológica, social y financiera de ETA.

Pues ahora Zapatero pretende justo lo contrario: dar soporte al fanatismo islámico que genera recursos humanos y financieros para el terrorismo islamista. Zapatero pretende que nos aliemos con nuestro enemigo. ¡Conmigo que no cuente!